Los elefantes africanos siguen disminuyendo por la caza furtiva
A pesar de que los niveles de caza ilegal se han reducido desde su máximo de 2011, aún siguen sin ser sostenibles para los elefantes.
La caza furtiva de elefantes en África sigue manteniéndose por encima de la tasa sostenible de captura de los paquidermos, por lo que la cantidad de animales siguió disminuyendo en 2015, según un informe de la ONU publicado hoy.
El estudio, elaborado por el Comité permanente de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Salvajes de Fauna y Flora (CITES), indica que a pesar de que los niveles de caza ilegal se han reducido desde su máximo de 2011, aún siguen sin ser sostenibles para los elefantes.
"La población de elefantes africanos siguen enfrentándose a una amenaza inmediata contra su supervivencia debido a los niveles inaceptables de caza furtiva para obtener su marfil", dijo en un comunicado el secretario general de CITES, John E. Scanlon.
Por zonas, tan sólo se registró una mejora considerable en el este del continente, donde en 2015, y por cuarto año consecutivo, el número de nacimientos de paquidermos superaron a los cazados.
Aún así, esa situación no se dio de manera uniforme en la región, ya que en zonas de Tanzania si que hubo un aumento de ataques ilegales.
En el sur de África el número de elefantes cazados ilegalmente también se mantuvo por debajo de la tasa sostenible, pero aumentó respecto a 2014.
Los peores niveles se documentaron en África central y oriental, donde la tasa de caza furtiva sigue manteniéndose muy por encima de los nacimientos de elefantes.
"Los niveles de caza furtiva siguen siendo muy elevados en el centro y oeste de África, pero es una buena señal que haya zonas como el este en el que la tasa haya disminuido, lo que nos demuestra que esto es posible a través del esfuerzo y del apoyo político", añadió Scanlon.
Una de las zonas que más preocupa a CITES es el Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica, donde se ha registrado un aumento notable de la cacería furtiva.
Respecto al comercio ilegal de marfil, la principal causa de muerte de los elefantes, el comité identifica a 22 países como los más implicados, entre los que se encuentran Camerún, Congo, Egipto, Etiopía, Gabón, Kenia, Mozambique, Nigeria, Uganda y Tanzania.
EFE